Migrantes tardios, los papamoscas llegan a nuestra tierra en el paso primaveral durante los meses de abril y mayo aunque algunos ejemplares siguen pasando cuando ya la mayoria de las especies migradoras están asentadas en sus zonas de cria.
En estas fotos un macho de Papamoscas Cerrojillo " Ficedula hypoleuca" en la tarde del dia 13 de mayo en los jardines Celestino Mutis, en la ciudad de Cadiz.
La gran mancha blanca frontal nos indica que es un ejemplar de la subespecie F.h.iberiae, que nidifica en la Peninsula Ibérica, lo que puede hacer que al tener sus zonas de cria mas cercanas no se de tanta prisa en llegar como aquellos que nidifican en el norte de Europa.
En esta imagen una hembra.
Su primo el Papamoscas Gris " Muscicapa striata", abundante como nidificante en nuestra sierra y en la campiña arbolada, es tambien un migrante tardio y suele comenzar a nidificar bastante tarde, sobre todo en el mes de junio por lo que tampoco tiene prisa en llegar.
Son pájaros insectivoros que deben adecuar su llegada a nuestra tierra con la mayor disponibilidad de alimento y como estamos seguros que saben lo que hacen no les criticamos que lleguen tarde a su cita con nosotros.
En esta especie no hay un marcado dimorfismo sexual con lo que no es tan fácil diferenciar machos y hembras.
Estas fotos son tambien de la tarde del 13 de mayo en los jardines Celestino Mutis, en Cadiz, cuando eran practicamente, salvo algún Alcaudon Común retrasado, los únicos migrantes presentes.
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