Dejamos Cobá y nos dirigimos a Tulum. Como era mediodia y hacia mucho calor lo primero que hicimos fué buscar un cenote donde refrescarnos y elegimos el Cenote Dos Ojos, en el que ya nos encontramos.
Se trata de dos cenotes cueva con entrada lateral separados uno del otro por algo menos de 100 metros.
El agua cristalina y con poca profundidad. Se veia el fondo perfectamente. Y muy agradable para el baño.
Algunas formaciones rocosas típicas de cuevas.
En esta ocasión no recordamos haber visto los peces habituales de los cenotes.
Entrada lateral del primer cenote.
A corta distancia de las entradas y entre los dos cenotes los abundantes Momotos Cejiazules " Eumomota superciliosa", que se dejaron fotografiar con la cámara acuática.
Segundo cenote, tan espectacular como el primero si no más.
Y mucho mas tranquilo. Estábamos practicamente solos.
Entrada del segundo cenote.
Y en una de las rocas uno de los Momotos Cejiazules que nidifican en la zona y que entraban y salían frecuentemente del cenote cueva.
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