MUKIZA

Llegamos al centro de recepción en el sector Ruhija del P.N. de la Selva Impenetrable de Bwindi dispuestos a caminar lo que haga falta para ver a los Gorilas.

Esperando a que se organice la salida.

Nos ofrecen unos bailes típicos de la zona durante la espera. Es de agradecer la amabilidad de todo el personal local que se mueve alrededor de esta experiencia.

 Y por fin nos asignan la familia de gorilas a visitar. El grupo se llama Mukiza, nombre del macho dominante. Se trata de un ejemplar de 20 años que hizo su propio grupo tres años atrás separándose con algunas hembras y jóvenes de la familia Oruzogo cuando esta  se hizo muy grande.
 Esta familia Oruzogo fue la segunda  de la zona habituada a las visitas lo que ocurrió en 2012, después de que la familia Bitukura fuera habituada en 2008.

 Por fin subiendo al vehículo que nos llevaría al punto de comienzo del trekking.

 Y aquí una vista de la selva. El P.N. de Bwindi protege 331Kms cuadrados de selva de montaña en el extremo suroeste de Uganda y a corta distancia de las montañas Virunga, que hacen frontera con Ruanda y la R.D. de Congo, y que son la otra zona donde viven los Gorilas de Montaña " Gorilla beringei". Ambas zonas selváticas formaron una extensión continua hasta los siglos XVI- XVII en que la deforestación y puesta en cultivo de las zonas bajas de los valles intermontanos aisló los dos macizos montañosos con su interesante  fauna.

 Ya estamos bajando las primeras rampas. Decir que comenzamos a andar a mas de 2300 metros de altura.

 Magdalena con Gloria, a la que contratamos como ayudante. La población local se beneficia de muchas maneras de la economía que mueve la protección de los gorilas, incluso parte de  los 600 dólares por persona que cuesta la visita de dedica  a mejorar las condiciones de vida de las pequeñas poblaciones de los alrededores; colegios, centros de salud, carreteras....
 Realmente si la población local no se beneficia de los ingresos que deja el turismo no ven al Gorila como algo útil y beneficioso para ellos.

Después de poco mas de hora y media de marcha, subiendo y bajando empinadas laderas, nos metemos en lo mas denso de la vegetación a base de machete.

 Y al poco nos encontramos con Mukiza y su familia.

Impresiona estar a 5-6 metros de este gran macho de mas de dos metros de altura y según nos decían 230 Kgrs de peso.

Y sin inmutarse por nuestra presencia seguía comiendo tranquilamente.

Esto fue como un bostezo, no una demostración de fuerza.

 Al rato de estar con el grupo se movieron unas decenas de metros para cambiar de lugar, siguiéndolos nuestro guía y detrás nosotros, siempre a muy corta distancia.

Aqui vemos a Mukiza con Mugwere, su hembra principal, detrás.

 Con una dieta prácticamente vegetariana se pasan buena parte del dia comiendo.

Magdalena y yo a unos 5-6 metros de Mukiza. No nos recomiendan acercarnos mas sobre todo por la seguridad del grupo de Gorilas, ya que podemos transmitirle cualquier enfermedad vírica con un simple estornudo, ya que nuestras enfermedades pueden afectarles seriamente al no tener inmunidad para ellas.

En esta imagen se aprecia perfectamente la espalda plateada típica de los machos adultos.

Aquí en posición de descanso y como pensando qué pintábamos allí. Tienen una mirada inteligente y realmente lo son. Les falta hablar, y son normalmente de temperamento tranquilo y pacíficos. No son nada agresivos si no se sienten atacados.

 Aprovechando que la hembra dominante  se había alejado un poco, esta otra hembra se acercó  en actitud provocativa.

 Y a punto estuvo de lograr su objetivo...

 Pero apareció este joven, seguramente hijo suyo y fastidió el momento.

 Lo que se tomaron con tranquilidad y resignación tanto el macho como la hembra. Habrá mas oportunidades.

Bonitas imágenes familiares.

En la próxima entrada mostraremos a otros miembros del grupo.