POR FIN CONSEGUIMOS FOTOGRAFIAR AL AVETORO

 Este invierno está siendo muy bueno para ver e intentar fotografiar Avetoros " Botaurus stellaris" en el entorno del P.N. Doñana, ya que la gran sequia que padecemos hace que haya pocos lugares adecuados con agua y los cañaverales en los que se camufla perfectamente están muy pobres en vegetación y dan menos cobertura de lo habitual.

Por esos motivos nos acercamos a probar suerte en la mañana del pasado sábado 11 de marzo y después de casi 200 Kms de carretera y pista, a las 9 de la mañana ya estábamos buscándolo con poco éxito ya que la pista deja el caño a contraluz a primeras horas de la mañana y era casi imposible ver a un ave  tan escondediza y con un plumaje tan críptico.

Seguimos adelante y nos dedicamos a otras aves, menos de las habituales, hasta que decidimos dar la vuelta y volver a intentarlo. Esta vez hubo suerte ya que al cruzarnos con otro vehículo nos avisaron de la presencia de un Avetoro muy confiado un poco mas adelante de donde estábamos.

 Y ya lo tenemos aquí, menos escondido de lo habitual y a no mas de 15 metros de nosotros.

 

Al poco tiempo el ave decidió salir de su escondite  paseando tranquilamente.

 

Y subió el terraplén  que había al otro lado del caño.

 Para una vez arriba  posar  totalmente al descubierto.

 

En diferentes posturas.

  

De vez en cuando cambiaba de posición.

 Para seguir posando al descubierto, algo que no nos hubieramos imaginado.

 

Lo que nos permitió fotografiarlo todo lo que quisimos.

 

Así estuvimos, nosotros a un lado del caño y el al otro, casi dos horas observándonos.

 

Creemos que quería volver al caño pero no se atrevía. Tampoco parecía que estuviera muy preocupado ni asustado.

 

Al final decidió levantar el vuelo...

 Y volver a esconderse en los cañaverales 80-100 metros alejado de donde estábamos. Nos acercamos y todavía le hicimos algunas fotos en su ambiente  mas previsible y lo dejamos tranquilo.

Todo un éxito para nosotros.

 Se trata de la garza mas escasa de la Peninsula Ibérica donde en el mejor de los casos solo hay unas decenas de parejas reproductoras y en las marismas del Guadalquivir, incluyendo el P.N. Doñana, después de perderse la población reproductora en las sequias de los años 90 y volver a recuperarse un poco a principios de los 2000, estos últimos años, también secos y con muy mala gestión del agua en la periferia del parque, puede que crie alguna pareja ocasional no se sabe hasta cuando.